Las universidades deben evolucionar para mantenerse relevantes y solventes, según Danny Berrido, hijo de inmigrantes para quien la educación significó una vía hacia la oportunidad, la independencia y el impacto. Berrido cuestiona la rigidez del sistema educativo y propone un aprendizaje más flexible, personalizado y alineado con los objetivos del mundo real. Durante su posgrado, experimentó la posibilidad de modelos híbridos y en línea, que, aunque no perfectos, ofrecían una nueva dirección. Trabajando para una universidad, Berrido formó parte de un equipo que implementó la programación en línea,